ACEITE Q de ALDAMA = Q de CALIDAD SUPREMA aceite de oliva virgen extra Riojano

Aceite Q de Aldama

Mi amigo Cesar León forjador de Vinomio me ha regalado un aceite que es todo un descubrimiento. Q de Aldama, es Q de calidad, un aceite soñado y creado en Quel. Un virgen extra de olivas arbequinas recolectadas en la finca La Remediana mediante proceso de extracción en frio que hace las delicias de los paladares más exigentes y colma a los sibaritas como el menda lerenda.

Esta gente de Quel es cosa seria, y completa otra gama de buenos aceites hechos en Rioja con mucho mimo y cariño, como se hacen las cosas que merecen la pena, que generan emoción y que te ponen los pelos como escarpias cuando tienes el placer de degustar un aceite como este con un pan de verdad, no los de gasolinera y panishop.

Lo que queda del Muro de Berlín en la East Side Gallery

Ver la East Side Gallery es obligado si pasas por Berlín. Te permite hacerte una idea de que debía sentir la gente que quería cruzar al otro lado sin conseguirlo, muchas personas perdiendo la vida en el intento. Cuando lo recorrimos había autobuses de turistas que aparcaban en la calle, para echar unas fotos apresuradas y salir cagando leches a otra parte. La pena es que mucha gente se ha dedicado a escribir estupideces en el muro, pijadas al estilo, Fulanito estuvo aquí en tal fecha, o escribir frases y de los dibujos originales que hicieron los artistas cuando cayó el muro cada vez va quedando menos.

Lo que queda del Muro de Berlín


La nueva sinagoga en Berlín

La nueva sinagoga

El último día, antes de ir al aeropuerto, mientras la pertinaz lluvia nos mojaba con ganas, cogimos el metro, bajamos en Oranienburger y nos topamos casi de frente con el reflejo dorado de la Nueva Sinagoga, el más importante lugar de culto judío. Desgraciadamente estaba cerrada y no pudimos acceder a su interior.

La nueva sinagoga Berlín

Su imponente tamaño hace que desde la Torre de la televisión o desde la Cúpula del Bundestag se vea claramente su cúpula dorada, marcando el Skyline de Berlín. Al fondo como siempre se ve el omnipresente Pirulí, el cual sirve de referencia en casi cualquier parte de la ciudad.

Comer en Berlín

Comer en Berlín 1/2 pollo 2 euros

No me pareció nada caro comer en Berlín. La oferta de restaurantes es inmensa. Al ladito de la pensión, según íbamos a coger el metro en Frankurter Tor, pasábamos todas las mañanas por este local de unos turcos, donde como se ve, te podías pimplar medio pollo por sólo 2 Euros. Y no eran pollos piccolinos, sino de un tamaño normal. La cerveza de trigo, que bebíamos a diario nos costaba unos 3 euros el medio litro. Más me cobran en Logroño en el Fax, cuando me tomo una Franciskaner. Comimos en restaurantes indios, chinos y thailandeses y las raciones eran generosas y rondaban los cinco euros. Luego comer y beber nos salía por menos de 10 €, algo que se me hace barato tratándose de una capital Europea y sabido los puros que te meten en ciudades como Estocolmo, Amsterdam, Roma o Barcelona si quieres comer y beber fuera de casa todos los días.