Archivo del Autor: El sibarita

Tajmahall comida India en Logroño

Tajmahall restaurante indio en logroño

Ya que en Logroño disponemos de pocos restaurantes étnicos la apertura de un presunto restaurante indio, en un local, donde en su día hubo un restaurante chino, que fue uno de los primeros chinos en abrir en la capital Riojana, y también de cerrar, es toda una noticia. Finalmente accedimos al local esta semana.

El restaurante es bastante grande, si bien estaba practicamente vacío. Allí recaló una familia, un americano y nosotros. Agradezco, no solo en los indios, sino en un japonés, que quien me toma nota, me asesore, como te asesoran si vas a una tienda a comprar ropa, un televisor o cualquier otro producto. El vendedor descubre le que te puede gustar y te ofrece un producto acorde con tus deseos. Esto en restaurantes a los que he acudido no sucede. Si vas a un Japonés, parece que tienes la obligación de ir con la lección aprendida, y si les preguntas la diferencia entre sushi, sashimi, te miran mal, como si fueras un ignorante que ha ido allí a hocicar, sin mostrar ningún respeto por su comida milenaria y lejos de verte ayudado te sientes ninguneado (o quizá no pero tengo las defensas bajas y estoy supersensible, que puede ser). En el Indio este de marras, el TajMahall, sucede algo parecido. Tienen una carta muy amplia, pero puestos a pedir auxilio o socorro, alguna recomendación, la chica que atiende, pone voluntad pero eso no ayuda, sino se conoce a la perfección cada uno de los platos. Hay que tener en cuenta sobre todo el picante que en estos platos hace acto de presencia. Si a alguien no le va el picante, y no le advierten y compruebas que tu lengua echa humo salvo cuando bebes cerveza, es posible que no repitas nunca más. Si te advierten o te orientan hacia otros platos que pueden adaptarse a tus gustos el varapalo puede ser menor.

Al final siempre tienes la opción de pedir un menú variado y así probar el mayor número de cosas a las bravas, que es lo que hicimos. Por la mesa desfilaron entrantes a bases de verduras y legumbres, que pecaban de aceitosos, un arroz mediocre (quien come sushi sabe que un pescado mediocre tiene arreglo pero un pescado excepcional con una arroz malo no tiene remedio. No lo digo yo lo dice un cocinero japonés cuyo nombre no recuerdo que lo explicaba el otro día en un reportaje estupendo sobre el Sushi en la 2), un pan, que era una torta aceitosa, y luego dos cacerolos de bolsillo, uno con pollo, una salsa de curry, coco y nata líquida y otro de cordero, flotando en una salsa con cilantro y demás hierbas. De postre nos ventilamos un batido de mango y una tarta con azafrán, que resultó ser lo mejor de la comida. Para beber cerveza india.

Al final de la sala había un televisor, encendido. Cuando la camarera nos tomó nota y una de nuestras hijas, como el oráculo que habla dijo «no se come viendo la tele«, la camarera entendió lo que quiso entender y lejos de apagar la tele, quitó el canal de Antena 3 y puso Clan (los que tienen hijos saben de sobra que Clan+Disney Chanel+Boing=Santísima Trinidad). Así las niñas mientras se ventilaban su arroz basmati con pechuga de pollo, echaban un vistazo a Bob Esponja y a Calamardo. El televisor se veía y se oía.

Uno sale de su casa para recibir nuevas sensaciones, entra en un restaurante, como el que entra un templo, gastronómico, en este caso, con idea de desconectar y dejar los sentidos a merced de los alimentos que ingiere y te das cuenta de no hay escapatoria, que los restaurantes, ya sea con televisores o con música a todo volumen, que también sucede, hacen que la experiencia gastronómica, no sea tal.

Si a la hora de pagar, te sueltan en todo el morro, a quemarropa, que no admiten tarjetas (lo cual no está escrito por ninguna parte, ni dentro ni fuera del local), y tienes que ir a buscar un cajero por la zona, el resultado de la cena es pésimo y tienes claro que no volverás, o quizá sí, porque como dice el refrán no podemos afirmar que «De este Indio no comeré».

A finales del 2013, el restaurante después de un año abierto ha cerrado. Fin de la historia. Ahora el que quiera comer comida india, o lo que sea que hagan en sus cocinas, tendrá que ir a la Calle Chile, que hay otro restaurante indio.

Taj Mahall cerrado en Logroño

Corazón de tinta (Cornelia Funke 2003)

Una amiga me recomendó Corazón de tinta de Cornelia Funke, una escritora alemana, ilustradora y autora de libros infantiles que había cosechado un gran éxito con esta novela en su país y que es autora de otros tantos libros infantiles como El jinete del dragón (2004) o El señor de los ladrones (2002), por citar alguno. El libro me ha gustado mucho. Es ameno y divertido, con un halo mágico que te mete en la historia desde el principio, donde entusiasmarse con las desventuras de Mo, Meggie, Dedo Polvoriento, Capricornio, Farid y demás personajes de la novela. La historia hace que Mo, un encuadernador de libros tenga la facultad de, al leer los libros en voz alta hacer que los personajes de los mismos dejen el libro para salir al mundo exterior. Si alguien sale de libro, alguien de fuera debe entrar en él, «quid pro quo«. Pero a veces el infortunio juega malas pasadas. De tal modo que la mujer de Mo, Teresa, pasa a formar parte de un libro titulado Corazón de tinta.

Este libro se lee con suma facilidad y entre los capítulos hay ilustraciones de la autora. La novela nos permite desconectar del murmullo circundante, de la algarabía política y de los teledarios sangrantes para embebernos en la lectura de una novela bien narrada, con una trama muy sugerente, con la que pasar unas cuantas horas de agradable lectura. La continuación de Corazón de tinta, fue Sangre de Tinta publicado en 2005 y se ha cerrado la trilogía con Muerte en tinta.

Restaurante Indio TajMahall en Logroño

En la Avenida Gonzalo de Berceo, en la ciudad de Logroño, donde hace unos años abrió sus puertas el restaurante La Gran Muralla, un restaurante chino, pionero en la ciudad, tras llevar unos cuantos años cerrado, finalmente, han decidido darle algo de vida al local. Se trata de un restaurante. El Restaurante Indio TajMahall. (el nombre del restaurante es de chiste, tanto como esas tiendas de ropa chinas que se llaman Fara). Cuando vi el cartel, ingenuo de mí, me emocioné, pues que yo sepa creo que no tenemos ningún restaurante Indio en Logroño. Lo inauguran hoy viernes. Me acerqué a la entrada a consultar los platos, y me llevé un chasco, dado que no se distingue en nada de un Kebah convencional. Unos días después he visto que además de la comida típica de un kebah hay otros platos, al parecer indios, pero según indican preparados a la manera occidental.

Si alguien lee esto y come en este restaurante que comente qué le ha parecido. De esta manera mejora la oferta culinaria de la zona oeste, un tanto desguarnecida, dado que salvo El Cid, El Egües y la Bodeguilla, no hay restaurantes hasta que llegas a la Gran Vía y te topas que un «Japones» y un «Wok«. El Tapelia cerró y no han vuelto a abrir nada en ese local.

Fotos San Bernabé Logroño 8 al 11 de junio 2012

Del 8 al 11 de junio han tenido lugar las fiestas de la ciudad de Logroño, de San Bernabé. He puesto unas fotillos del día 11 de junio que es cuando tuvo lugar el reparto de los peces y los panes, y el vinico para el que quisiera. El tiempo, al menos por la mañana acompañó, porque a la tarde cayó una buena chaparrada. Hubo buen ambiente y el casco antiguo estuvo a tope de gente, bien surtido con un sinfín de puestos donde pertrecharte si querías de quesos, embutidos, magdalenas, bolsos, perfumes, cestos….

Concatedral de La Redonda Logroño

Concatedral de La Redonda en Logroño

Cuca Gamarra y otros miembros del Ayuntamiento

La alcaldesa, Cuca Gamarra y otros miembros del Ayuntamiento; Fito, Felipe Royo, etc..

Charangas peñas San Bernabé Logroño 2012

Charangas y Peñas por la Calle Portales de Logroño.

Colas para coger el pez

Largas colas en la Calle Once de Junio y la Calle Mayor para coger el pan y el pez.

Danzas regionales

Yo quiero verte danzar…

Danzas regionales
Las más pequeñas con el traje típico regional y bailando.

Calle Ollerías

Al lado mismo del Espolón y de Portales, la calle Ollerías, un reducto de paz y tranquilidad en todo el cogollo festero.

Calle San Juan buenas tapas y pinchos

Calle San Juan. Un lugar ideal para tomar pinchos, tapas.

Un plano de la calle San Juan para no perderse entre tanto garito

Un plano que nos aclarará las dudas acerca de qué comer, beber o donde alojarnos, en ese miríada de bares, tascas, locales y garitos que conforman esa maravillosa calle Logroñesa (que en nada tiene que envidiar a la laureada Laurel) que es la San Juan y que dicho de paso posee la mejor librería de todo Logroño, Castroviejo Librero (San Juan 21).