Archivo del Autor: El achicador

Madrid

Estos días anduve por Madrid de curso, y el poco tiempo libre lo aproveché para caminar por la ciudad. Me chocó el tráfico incesante. Los policías controlando el mismo más allá de los semáforos. Cantidad de ambulancias a toda pastilla por la Gran Vía, así como muchos coches de policía escoltando a «personalidades». El alojarte en un hotel céntrico, en la Calle del Río, a dos minutos andando de la Plaza de España ( Casón del Tormes) permite ir al cogollito de la ciudad andando. Así al salir del hotel, a mano izquierda, a 50 metros llegas al Senado, un edificio que nunca sale en ninguna parte, porque el Congreso de los Diputados se lleva siempre los honores. Por la calle Bailén vi el Palacio Real, y luego la Iglesia de la Magdalena, mientras muchos aprovechaban la zona peatonal para correr, a pesar de que hacía frío y chispeaba.

Luego cogí la Calle Mayor, vi un sinfín de establecimientos. Muchos negocios dedicados a la venta de jamón. No faltaban tampoco las torrijas y los mazapanes y polvorones, a pesar de estar ya en marzo. En un abrir y cerrar de ojos me vi ante la Plaza Mayor, la cual recorrí por los soportales, para acercarme luego antes de dejar la plaza hasta la estatua ecuestre de Felipe III, que me recordó a la de Espartero (vi también una calle llamada Esparteros) en Logroño, y luego cogí la Gran Vía de nuevo hasta la Puerta del Sol. Allí vi a los «hombres pancarta«, los que quiere quitar el Excelentísimo Alcalde, porque afean la ciudad. Ante el oso y el madroño todos los turistas que llevaban cámaras se retrataban. A falta de cámara archivé unas instantáneas mentales. Luego enfilé Preciados, que estaba a rebosar de gente, entrando de El Corte Inglés y otros comercios, y poco después llegaba a la Plaza de España. Me quedé con las ganas de cenar en un restaurante wok que había antes de enfilar la calle Leganitos, y en su lugar despaché unos huevos rotos, en un local cuyo cartel anunciaba que llevaba abierto (nada menos) que desde 1999, donde lo más reseñable era una cerveza San Miguel en caña que me supo a gloria. Todo este recorrido lo hice en apenas dos horas. Tiempo suficiente para airearme y ver algunos de los lugares más emblemáticos de la villa de Madrid, capital de España (artículo 5 de la Constitución). Además vi también a un actor famoso, el cual no lo parecía, porque era más bajo que yo, y parecía un adolescente, a pesar de tener casi los treinta. Cuando encuentre como se llame el actor lo digo. El caso es que tengo que volver con más tiempo a Madrid, para empaparme bien de la ciudad y poder ver algún músical o acudir al teatro, que el lunes por desgracia estaban todos cerrados. Lo que vi me gustó.

OEP La Rioja 2009

APROBADA EN MESA SECTORIAL LA OFERTA DE EMPLEO PÚBLICO PARA LA COMUNIDAD AUTÓNOMA DE LA RIOJA 2009
Con fecha de 27 de febrero, en Mesa Sectorial de Negociación se ha aprobado la Oferta de Empleo Público 2009 para la Comunidad Autónoma de La Rioja relativa a plazas de personal funcionario, quedando pendiente su aprobación definitiva en Mesa General.
El Comité de Empresa se ha abstenido respecto a la Oferta de personal laboral, por lo que la decisión sobre el número de plazas laborales se traslada a la Mesa General.

Dentro de esta Oferta de Empleo Público no se incluyen las plazas de personal Docente de la Consejería de Educación ni de personal estatutario del Servicio Riojano de Salud, que llevan otros cauces de negociación y no se van a ver mermadas en número por el límite establecido en la Ley de Presupuestos Generales del Estado.

TURNO LIBRE P. INTERNA R. DISCAPACITADOS PROMOCIÓN
CRUZADA
TÉCNICO A.G. 2
GESTIÓN A.G. 2 2
ADMINISTRATIVO 3 15
GUARDA FORESTAL 1
AYUDANTE TÉCNICO EDUCACIÓN 34 Sigue leyendo

Doctor Mateo

Doctor Mateo los domingos en Antena 3

Tenemos nueva serie en televisión, en concreto en la privada Antena 3. El domingo se estrenó Doctor Mateo y duró más de dos horas. Todo acontece en un puesto asturiano costero. Al estilo de Doctor en Alaska el protagonista es un doctor, Mateo, que deja la cirugía en Nueva York para venir a un pequeño pueblo como médico. Allí se reencuentra con lo que fue su vida antes de dejar el pueblo y estudiar medicina. Se nos presentan toda la galería de personajes; Adriana, la atractiva profesora que tira los tejos al doctor Mateo, Carol una loctura de radio entrada en carnes, Elena, separada que vive con un hija adolescente. Está Alfredo el policía local, Tom el dueño del bar de voz ronca, dos hermanos fontaneros Ernesto y Paco, la tía de Mateo, Juana, que regenta una verdulería. Luego está el empresario y su mujer que le pone los cuernos y finalmente la ayudante de Mateo, una joven a la cual, tras despedir, con todo el pueblo en su contra, debe readmitir.

No es la serie una sucesión de gags, sino más bien una comedia de situación. El buen hacer de Gonzalo de Castro (Siete Vidas), de Natalia Verbeke, secundados por Esperanza Pedreño y Alex O’Dogherty (ambos vistos en Camera Café) o Rosario Pardo, permiten echarnos unas risas, al tiempo que hay también algún elemento dramático, como la posible enfermedad de Tom o cómo echa de menos Mateo esos años en su pueblo, quizá los únicos en los que fue en verdad feliz.

Se rueda la serie en Lastres, si bien el pueblo se hace llamar San Martin del Sella, y el pueblo es precioso, con una playa deliciosa y las casas encaramadas en la montaña. Un pueblo tranquilo donde reina la paz y la fraternidad, donde la vida fluye sin sobresaltos y todo resulta idílico.

La serie no ha funcionado nada mal ya que Doctor Mateo obtuvo un 26,5% de share en su estreno, conviertiéndose así en el mejor estreno de Antena 3 en los últimos años.

Caillou

uNa niña viendo CaillouAlgo ha de tener Caillou pues está en todos los hogares donde hay niños. Los dibujos no son nada espectaculares, sino todo lo contrario, pues prima la sencillez. Los cuentos son cortos, y no es el típico cuento donde pasan aventuras increibles, sino que todo es mucho más real, así que el cuento puede versar sobre el día que Caillou hace camping, sube en autobús, acompaña a su padre a trabajar, ve una estrella fugaz, o ayuda a su madre a hacer galletas. Esta sencillez supongo que será lo que le ha dado el éxito a la serie, pues raro es el niño que no lo conoce. Es verdad que la serie funciona como un sedante para las criaturas de un par de años (como la niña de la foto, extraida de flickr, titulada Carlota viendo «Caillou»), no sé si también para las que son un poco mayores, a las que supongo que Caillou les parecerá un sosainas.
Caillou vive con su madre, y su padre, y una hermana pequeña. Tienen también un perro, y de vez en cuando reciben la compañía de sus abuelos. Todo es buen rollito, cuando Caillou hace alguna gorda los padres en el caso de recriminarlo lo hacen de tal modo que no lo parece y las más de las veces acaban todos riéndose de las «ocurrencias» de Caillou, que como dice al principio de cada serie cuentos tiene cuatro añitos y crece muy despacito……