Que trata del curioso discurso que hizo don Quijote de las armas y las letras

A mí es uno de los fragmentos del libro que más me gusta. No me canso de leerlo una y otra vez. Inauguramos la sección dedicada al libro «El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha» con este discurso del caballero andante.

-Prosiguiendo don Quijote, dijo:

Pues comenzamos en el estudiante por la pobreza y sus partes, veamos si es más rico el soldado. Y veremos que no hay ninguno más pobre en la misma pobreza, porque está atenido a la miseria de su paga, que viene o tarde o nunca, o a lo que garbeare por sus manos, con notable peligro de su vida y de su conciencia. Y a veces suele ser su desnudez tanta, que un coleto acuchillado le sirve de gala y de camisa, y en la mitad del invierno se suele reparar de las inclemencias del cielo, estando en la campaña rasa, con sólo el aliento de su boca, que, como sale de lugar vacío, tengo por averiguado que debe de salir frío, contra toda naturaleza. Pues esperad que espere que llegue la noche, para restaurarse de todas estas incomodidades, en la cama que le aguarda, la cual, si no es por su culpa, jamás pecará de estrecha; que bien puede medir en la tierra los pies que quisiere, y revolverse en ella a su sabor, sin temor que se le encojan las sábanas.

Lléguese, pues, a todo esto, el día y la hora de recebir el grado de su ejercicio; lléguese un día de batalla, que allí le pondrán la borla en la cabeza, hecha de hilas, para curarle algún balazo, que quizá le habrá pasado las sienes, o le dejará estropeado de brazo o pierna. Y, cuando esto no suceda, sino que el cielo piadoso le guarde y conserve sano y vivo, podrá ser que se quede en la mesma pobreza que antes estaba, y que sea menester que suceda uno y otro rencuentro, una y otra batalla, y que de todas salga vencedor, para medrar en algo; pero estos milagros vense raras veces. Pero, decidme, señores, si habéis
mirado en ello: ¿cuán menos son los premiados por la guerra que los que han
perecido en ella? Sin duda, habéis de responder que no tienen comparación, ni se
pueden reducir a cuenta los muertos, y que se podrán contar los premiados vivos
con tres letras de guarismo. Sigue leyendo

El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha comentario sobre el libro

Don Quijote de la Mancha portada libroTras leer el fascinante libro del historiador Manuel Fernández Alvárez titulado Cervantes visto por un historiador, donde el autor escribe la biografía de Cervantes de un modo ameno y profundamente divertido, cosa extraña en los historiadores que tienden a pergeñar obras áridas, cargadas de datos y fechas que diluyen entre esa marasma de datos el potencial interés del libro, me veía en el deber de releer El Quijote.

Ya le había hincado el diente al libro hace casi quince años, pero por aquel entonces, fruto de la juventud me pareció un libro árido, intricado, complejo con un lenguaje inabarcable que me obligaba a estar continuamente consultando el diccionario. En resolución, por aquel entonces no lo disfruté.

Ahora tras acabar de leerlo hoy mismo, he de decir que el sambenito que El Quijote tiene hoy, su universalidad, su traducción a infinidad de lenguas es algo lógico a tenor de la calidad que tiene el libro de Miguel de Cervantes.

Don Quijote es el anti héroe el defensor de las causas perdidas, ahí radica la ternura de Don Quijote que en su afán de deshacer entuertos y agravios campea por tierras de Castilla, en pos de vengar cualquier afrenta que se interponga en su deambular, fiel adalid de las enseñanzas aprendidas en los libros de Caballerías que le nublan el sentido, interpretando el mundo a su manera, y montándose una película que solo él ve, si bien se ve secundado en su locura por el sin par Sancho Panza, que como fiel escudero leal a su señor verá maltrecho su cuerpo en numerosas ocasiones pero orgulloso de servir a un hombre íntegro, honesto y bueno como su señor Don Quijote.

Del Quijote se pueden verter ríos de tinta, pero yo lo recomendaría por que es un libro que divierte y entretiene, es tierno y enriquecedor, te permite echarte unas risotadas continuas, con las salidas de esta peculiar pareja y tiene un compenente dramático por otro lado insoslayable.

He creado una sección en la blog que se denominará El Quijote donde pondré fragmentos del libro, donde poder leer la opinión que el Quijote tiene sobre las mujeres, el matrimonio, los Turcos, los refranes, las letras y las armas, etcétera..

The guardian crítica película de Kevin Costner

The guardian cartel películaDirección: Andrew Davis.
País: USA.
Año: 2006.
Duración: 136 min.
Género: Drama, acción.
Interpretación: Kevin Costner (Ben Randall), Ashton Kutcher (Jake Fischer), Melissa Sagemiller (Emily Thomas), Bonnie Bramlett (Maggie McGlone), Clancy Brown (Capitán William “Bill” Hadley), Sela Ward (Helen Randall), Neal McDonough (Jack Skinner), John Heard (Frank Larson), Brian Geraghty (Hodge), Dulé Hill (Ken Weatherly), Shelby Fenner (Cate).
Guión: Ron L. Brinkerhoff.
Producción: Beau Flynn y Tripp Vinson.
Música: Trevor Rabin.
Fotografía: Stephen St. John.Montaje: Dennis Virkler y Thomas J. Nordberg.
Diseño de producción: Maher Ahmad.
Vestuario: Mark 

Para los actores talludos la edad no es óbice para aceptar rodar películas de acción. Connery hizo la Trampa doblando la edad de Catherine Zeta Jones, Stallone se enfunda las guantes a los sesenta tacos para la sexta entrega de Rocky y la cuarta de Rambo, Bruce Willis lo veremos en breve en la cuarta entrega de la Jungla de Cristal, y Kevin Costner se pone a remojo en The Guardian.

Costner (Randall) es un buzo rescatador de personas en mares procelosos. Un accidente de consecuencias fatales, le lleva como mal menor, para lamer sus heridas a una base, donde forman buzos, en la que ejercerá de instructor, como sub-inspector.
El contrapunto de Costner es Ashton Kutcher (Jake Fischer), un joven fornido y buen nadador que planta cara a Randall con su pose de comerse el mundo a bocados y un ánimo a prueba de bombas, que mantendrá un tira y afloja con su instructor. El resto de los alumnos tienen poco peso en la historia a excepción de un tripitidor el cual erre que erre, sigue buscando su sueño, bajo el refrán ese que dice que “quien la sigue la consigue” y propicia los “momentos clinex” que permiten vaciarnos por la vía lacrimógena. Sigue leyendo