Dover concierto Logroño 2008 Fiestas San Mateo

Ayer, dentro de las fiestas Mateas, tocaron en el Ayuntamiento de Logroño el grupo Dover. Habían estado por aquí tocando en la Adarraga en 1999. A las doce de la noche subieron al escenario. Las hermanas Llanos, Amparo y Cristina ambas teñidas de rubio platino. La pequeña de las Llanos, Cristina, la cantante, mostraba un físico totalmente opuesto al de sus comienzos. Ya no es regordeta, ahora está delgada y fibrosa, y se mueve sobre el escenario con movimientos espasmódicos, fumando y bebiendo, tirada sobre el escenario, levantando la pelvis, en posición fetal, portando un traje de fiesta muy glamuroso, perdiendo en alguna ocasión sus zapatos de tacón rojos, en resumen, una puesta en escena un tanto chocante.

La voz de Cristina siempre me ha gustado. Dover decidió cambiar de estilo y si bien siguen haciendo uso de las guitarras, bateria y bajo, ahora han introducido los sintetizadores, que tan buen resultado les ha dado con el exitazo “Let me out”. Han cambiado de estilo y de imagen, alejándose de su indumentaria grunge de los inicios. El caso es que mientras tocaban las canciones de los tres últimos discos la gente sobre el firme de la Plaza del Ayuntamiento no estaba muy animada, porque no se sabía las canciones (no olvidemos que Dover canta siempre en inglés). Hasta que no sonaron los temas de su segundo disco “Devil came to me”, (1997) no se vio a la gente saltar y cantar. Fue con el tema Serenade cuando se calentó el ambiente.

A los cincuenta y cinco minutos de concierto, dijeron que finalizaban. Luego volvieron para tocar cuatro temas más, entre ellos Devil came to me y tras una hora y cuarto de concierto, dieron las luces y se dieron el piro. Entre canción y canción Amparo hacía un pequeño introito a las mismas. Decía que tal o cual canción había sido muy especial para ella y para el grupo, sin precisar el porqué. El bajo, mientras, iba dando cuenta de la docena de cervezas que tenía a sus pies, y estático durante todo el concierto, movía de vez en cuando la cabeza, mostrando su pelo sedoso que le tapaba el rostro.
Cristina apenas habló con el público y cuando lo hizo tenía una voz pijilla, que contrastaba con la voz rasgada que tiene cuando canta, parecida a la de un gato con varicela.

El principal problema de cualquier grupo musical y de todo artista en general, es el encasillamiento, repetir una y otra vez el mismo tema que les han granjeado el éxito, por ello es meritorio que Dover haya tratado de dejar de lado sus inicios rockeros y hayan optado por torear en otras plazas, lo que no me convence del tema es que cuando toquen las canciones de su primer disco, las versionen de tal manera, con la musiquita discotequera de fondo, que las hacen casi irreconocibles, extrañas, de tal manera que no me gustaron nada al escucharlas bajo ese nuevo formato.

Dado que el concierto fue gratuito y estuve en buena compañía no me quejo. Un idiota, tras ventilarse una litrona delante nuestro, luego la tiró en el suelo, y poco me faltó para no hacer el “pisado de la litrona”, y dejarme allí un tobillo, pero ya sabemos que el incivismo es el pan nuestro de cada día.

Ahora a mediados de Octubre viene a Logroño Extremoduro, a presentar los temas de su último disco, Ley Innata. No iré a verlos. Robe Iniesta ya ha confesado que odia dar conciertos y es cierto, se le nota. La última vez que tocaron en Logroño, Robe se plantó en el escenario, cantó, tocó la guitarra y se marchó. No interactuó absolutamente nada con el público, a pesar de haber pagado 20 euros para verlos. Así que me escucharé el disco en casa, que viene a ser lo mismo que verlos en directo, porque todo hay que decirlo en vivo Extremoduro suena fabuloso, al igual que Fito.

Bicing Barcelona

Bicing Barcelona

En mi estancia en Barcelona vi que el carril bici estaba presente en casi todas las calles importantes. Lo usaba infinidad de gente y muchos además de usar su bici propia, recurrían al sistema de préstamo de bicicletas, conocido como Bicing. En el periódico La Vanguardia es frecuente que la gente se queje de este servicio casi a diario. Las pegas son que no puedes disponer de una misma bicicleta más de media hora, luego has de cambiar de bici si quieres seguir empleando este medio. A veces a la hora de entregar la bici en un sitio está lleno y has de dejarlo en otro más lejos, con el incoveniente que supone y excedido de tiempo.

Como todo sistema, seguro que es susceptible de mejora, y todos aquellos que usan la bici para ir a trabajar, o desplazarse no están usando el coche y por tanto contaminando, así que a pesar de los peros, que seguro que los hay creo que hay que reconocer es una buena iniciativa, a fin de lograr un ciudad limpia y ecológicamente sostenible, si bien el tráfico a pesar de las bicis y de las motos, sigue siendo infinitamente más intenso que en la ciudad de Berlín.

Los Monegros

Los Monegros

Este paisaje de Los Monegros me encanta. Es como una parrilla, puro matorral, pero tiene su punto. Parece un buen sitio para rodar una película del oeste, o de corte futurista. El escenario de la batalla cuando todo ha acabado.

Pensión Iniesta Barcelona

Ventana Pensión IniestaRecientemente pasé por Barcelona e hice noche en esta pensión, la pensión Iniesta. Se anuncia como la más barata de Barcelona. Su ubicación es buena. Situada en el Paralelo, en la calle Fontrodona, número 1, cogiendo la Nou Rambla te plantas en la Rambla en menos de 15 minutos paseando. De paso puedes ver el Bagdag, mítico porno Show. De allí todo el cogollo de la ciudad está a pedir de mano.

El edificio donde está ubicado la pensión es antiguo y la entrada de la pensión es cutre. Nos tocó en la segunda planta y la habitación estaba bastante desvencijada. Más allá del precio lo mínimo que se puede pedir es limpieza. La habitación tenía un armario al que le faltaba un pomo, un baño que no constaba de portarollos, una ventana que no se podía cerrar, y una cortina que no se podía correr porque Pensión iniesta parada autobusesla barra estaba rota. Estas cosas son las que se ven en la fotografía.

El que se duerma como un lirón y no haya ambulancia que le perturbe, seguro que queda encantado. A los que nos cuesta algo más dormir, ni el ventilador me quitaba el calor que sentía, y continuamente escuchaba motos, coches, ambulancias y ladridos de perro de la calle. Además frente a la ventana había una parada de autobuses y donde yo tenía la almohada en esa pared, al otro lado, había un baño así que cuando tiraban de la cadena o sonaba la cisterna era como si se me fuera a anegar el cerebro.
Pensión iniesta Baño sin portarrollos
En todo caso, para gustos colores, así que quien haya visto más mundo y dormido en pensiones más cutres esta le parecerá un oasis, pero yo no pienso repetir en ella, a pesar de que los dos hombres de la recepción, el argentino y el italiano fueran gente muy simpática.