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Don Quijote habla sobre la belleza interior y exterior

-Advierte, Sancho -respondió don Quijote-, que hay dos maneras de hermosura: una
del alma y otra del cuerpo; la del alma campea y se muestra en el entendimiento,
en la honestidad, en el buen proceder, en la liberalidad y en la buena crianza,
y todas estas partes caben y pueden estar en un hombre feo; y cuando se pone la
mira en esta hermosura, y no en la del cuerpo, suele nacer el amor con ímpetu
y con ventajas. Yo, Sancho, bien veo que no soy hermoso, pero también conozco que
no soy disforme; y bástale a un hombre de bien no ser monstruo para ser bien
querido, como tenga los dotes del alma que te he dicho.

Que trata del curioso discurso que hizo don Quijote de las armas y las letras

A mí es uno de los fragmentos del libro que más me gusta. No me canso de leerlo una y otra vez. Inauguramos la sección dedicada al libro «El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha» con este discurso del caballero andante.

-Prosiguiendo don Quijote, dijo:

Pues comenzamos en el estudiante por la pobreza y sus partes, veamos si es más rico el soldado. Y veremos que no hay ninguno más pobre en la misma pobreza, porque está atenido a la miseria de su paga, que viene o tarde o nunca, o a lo que garbeare por sus manos, con notable peligro de su vida y de su conciencia. Y a veces suele ser su desnudez tanta, que un coleto acuchillado le sirve de gala y de camisa, y en la mitad del invierno se suele reparar de las inclemencias del cielo, estando en la campaña rasa, con sólo el aliento de su boca, que, como sale de lugar vacío, tengo por averiguado que debe de salir frío, contra toda naturaleza. Pues esperad que espere que llegue la noche, para restaurarse de todas estas incomodidades, en la cama que le aguarda, la cual, si no es por su culpa, jamás pecará de estrecha; que bien puede medir en la tierra los pies que quisiere, y revolverse en ella a su sabor, sin temor que se le encojan las sábanas.

Lléguese, pues, a todo esto, el día y la hora de recebir el grado de su ejercicio; lléguese un día de batalla, que allí le pondrán la borla en la cabeza, hecha de hilas, para curarle algún balazo, que quizá le habrá pasado las sienes, o le dejará estropeado de brazo o pierna. Y, cuando esto no suceda, sino que el cielo piadoso le guarde y conserve sano y vivo, podrá ser que se quede en la mesma pobreza que antes estaba, y que sea menester que suceda uno y otro rencuentro, una y otra batalla, y que de todas salga vencedor, para medrar en algo; pero estos milagros vense raras veces. Pero, decidme, señores, si habéis
mirado en ello: ¿cuán menos son los premiados por la guerra que los que han
perecido en ella? Sin duda, habéis de responder que no tienen comparación, ni se
pueden reducir a cuenta los muertos, y que se podrán contar los premiados vivos
con tres letras de guarismo. Sigue leyendo

El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha comentario sobre el libro

Don Quijote de la Mancha portada libroTras leer el fascinante libro del historiador Manuel Fernández Alvárez titulado Cervantes visto por un historiador, donde el autor escribe la biografía de Cervantes de un modo ameno y profundamente divertido, cosa extraña en los historiadores que tienden a pergeñar obras áridas, cargadas de datos y fechas que diluyen entre esa marasma de datos el potencial interés del libro, me veía en el deber de releer El Quijote.

Ya le había hincado el diente al libro hace casi quince años, pero por aquel entonces, fruto de la juventud me pareció un libro árido, intricado, complejo con un lenguaje inabarcable que me obligaba a estar continuamente consultando el diccionario. En resolución, por aquel entonces no lo disfruté.

Ahora tras acabar de leerlo hoy mismo, he de decir que el sambenito que El Quijote tiene hoy, su universalidad, su traducción a infinidad de lenguas es algo lógico a tenor de la calidad que tiene el libro de Miguel de Cervantes.

Don Quijote es el anti héroe el defensor de las causas perdidas, ahí radica la ternura de Don Quijote que en su afán de deshacer entuertos y agravios campea por tierras de Castilla, en pos de vengar cualquier afrenta que se interponga en su deambular, fiel adalid de las enseñanzas aprendidas en los libros de Caballerías que le nublan el sentido, interpretando el mundo a su manera, y montándose una película que solo él ve, si bien se ve secundado en su locura por el sin par Sancho Panza, que como fiel escudero leal a su señor verá maltrecho su cuerpo en numerosas ocasiones pero orgulloso de servir a un hombre íntegro, honesto y bueno como su señor Don Quijote.

Del Quijote se pueden verter ríos de tinta, pero yo lo recomendaría por que es un libro que divierte y entretiene, es tierno y enriquecedor, te permite echarte unas risotadas continuas, con las salidas de esta peculiar pareja y tiene un compenente dramático por otro lado insoslayable.

He creado una sección en la blog que se denominará El Quijote donde pondré fragmentos del libro, donde poder leer la opinión que el Quijote tiene sobre las mujeres, el matrimonio, los Turcos, los refranes, las letras y las armas, etcétera..