Archivo por días: 27/05/2017

El pozo

El pozo (Juan Carlos Onetti)

Después de leer Los adioses quería leer la primera novela de Juan Carlos Onetti, El pozo, novela breve (apenas 30 páginas, en la edición de las Obras completas, Novelas I, de Galaxia Gutenberg-Círculo de Lectores, publicada en 1939, cuando Onetti contaba 30 años), pero que casa muy bien con el título de la novela, porque cuando asomado al brocal de un pozo, tiramos una moneda, esperamos escuchar el !plop! del metal abrazando el agua y esa espera nos mantiene en vilo, con la cabeza devorada por la oscuridad circular. Esta novela es una caída, una bajada a los infiernos, un testimonio, una moneda que es un narrador, un hombre cualquiera, un tal Eladio Linacero dispuesto a poner en negro sobre blanco -entre las paredes de una pensión-, hechos indecorosos (una violación por ejemplo), un narrador que a los cuarenta quiere escribir sus memorias, aunque dice que no sabe escribir. Hechos vividos le sobran, dice. Al narrador, pesimista convencido, todo le parece una mierda, todo vacío, intrascendente, así desprecia la política, el amor, la amistad, a quienes le rodean, que se le antojan unos flojos, tanto que aparece por ahí el vigor alemán, ese espíritu que Hitler encarna y que el narrador enaltece (en 1939) –con muy trágicas consecuencias como tuvimos la ocasión de comprobar-, lo suyo es la espera, una especie de Drogo (Buzzati escribió El desierto de los Tártaros, un año más tarde), cuyo enemigo invisible, es un ubicuo NO, camuflado de realidad y de un presente nihilista sin atributos.